La fuerza del espíritu, por Carla
Hola, tengo 23 años y vivo con esto desde los 5 años. Recién hace un par de años me diagnosticaron fibromialgia… Todo era mal, tuve que dejar mi carrera en la facultad de medicina. Yo solo quería parar y no me creían… Ni me creen aun…
Pero no importa, soy feliz. Dios me ha sanado, me ha dado vida de todas las maneras posibles… Y estoy retomando mi vida gracias a él.
Mi consejo es que no luchen por demostrar nada…
Nosotros somos los guerreros silenciosos de esta vida.
Eres genial, no des explicaciones, no te sientas ofendido, se fuerte y valiente…
Sólo piensa:¿Si aquella persona tuviera fb me estaría criticando? Por supuesto que no!!!
No se encierren, tomen sol, tomen agua, ejercítense, no se sobre exijan… Mereces todo lo bueno que Dios tiene para ti. Son tantas cosas que tengo que decirles! Asi que estoy escribiendo un libro. Si puedes ser feliz con la fibro, créeme, la vida no se acaba aquí…
En realidad recién empieza!
El primer brote se me presentó al año de vida. Un añito y ya estaba internada sin que pudieran explicar qué tenía. Desde niña, siempre cansada, a los 5 años el 1er vértigo fuerte, a los 9 años colitis. En ese lapso de 5 a 9 años fiebres, dolor en mi cuerpo. Mi sobre nombre “la niña que nació cansada”. Mi historia es larga…tengo 39 años con fibromialgia, ya casi 40 años próximos a cumplir. Diagnósticos: fibromialgia, neuralgia trigeminal, lupus, artritis, síndrome de fatiga crónica, neuropatía autónoma, ciática, lumbalgia, hipotensión ortostática, vértigo, ptosis de colon transverso, neuropatía auditiva, estoy perdiendo mi visión y una lista larga. Actualmente nefropatía incipiente, ya me dio un infarto. Terminé mi carrera con esfuerzo, aún así trabajé y estudié un año de mi maestría que no pude concluir, no era lo mismo 26 años de edad entonces que ahora, necesito dormir mucho y aún así me toma tiempo recuperar energías; actualmente sólo puedo cocinar y hasta eso me cansa y me alborota dolores más fuertes al mover la comida con la cuchara cuando cocino. Me doy cuenta del deterioro y aumento de limitaciones. Sin embargo, no puedo darme el lujo de rendirme. Aunque los dolores cada vez son más intensos y los resisto menos porque cuando dolores internos también se me alborotan como el intestino, los riñones y los pulmones y se inflaman y se desata la migraña más los dolores del cuerpo entero empiezo a sudar, temblar y vomitar de tantísimo dolor. Le pido a Dios que me dé fuerzas y alivio. Seguiré en pie de lucha, supongo que en algún momento perderé la batalla, pero orgullosa de haber dado a los míos un ejemplo de aguante y que en la vida no hay que rendirse. La vida, a pesar de todo, es hermosa.
Muy bien! Tengo apenas un par de semanas que me la diagnosticaron, pero esa confirmacion no me ha dado para abajo, al contrario! Tengo muchas ganas de vivir, de hacer muchas cosas, claro ahora todo con otro ritmo. Se me han estado presentando oportunidades laborales y escolares maravillosas, aparte que tengo la fortuna de que el circulo de personas que me rodea son maravillosas y aunque no comprenden a veces la FM, pero me apoyan en todo y respetan cuando les digo “hoy no puedo”.
Es verdad todo lo que dices Carla… solo teniéndola podemos entender como nos sentimos… nadie más… pero con fé, optimismo siempre, y mucha fuerza de voluntad podemos darle eol reverso, no se va, pero podemos seguir con ella, yo he tenido brotes en distintas etapas de mi vida, a los cinco años, a los diez, y así sucesivamente… hasta que a los 50 me dijeron es fibromialgia… aveces no puedo levantarme de la cama, ni vestirme sola, pero son unas horas, luego puedo ir revirtiendo la incapacidad al ponerme en movimiento, aunque el dolor es ese instante es muy intenso hay que moverse… pero la voluntad, el poder de la mente… yo podré con la fibromialgia, son fundamentales en ese momento… alimentación sana, sin conservantes, ni edulcorantes, caminatas, pilate, yoga, natación, baños de inmersión caliente, ayudan muchísimo… ánimo… se puede.
excelente Carla, sólo tengo un año que me la diagnosticaron, más sin embargo he podido ver la mano de Dios en cada día, nuevas son sus misericordias cada mañana (Lamentaciones 3:22-23). Todo tiene un propósito en Cristo, sólo debemos preguntarle a Dios para que y no por que, y tendremos un nuevo caminar.
Tal cual