Nilsa: un ejemplo de superación contra la FM
Un día sentía que la vida me aplastada. Sencillo comencé a darme cuenta que algo no estaba bien cuando sentía que no tenía fuerzas para vivir.
Las tareas del hogar se hicieron más difíciles realizar, la vida cotidiana se volvió una tragedia, no podía realizar mis tareas en el hogar y mucho menos en mi trabajo. Comencé a ir de médico en médico buscando que me dieran algo porque me sentía morir.
Pedía a personas de respeto que velaran mis hijas si yo faltara. No podía con el dolor, con el poco descanso, el insomnio y así me fui sumiendo en una depresión que no me permitía luchar ni vivir.
Aumenté de peso y entre estudio y estudio me diagnosticaron fibromialgia. Comencé a leer sobre la condición y me vi retratada en cada uno de sus síntomas. No podía realizar mi trabajo, mi concentración era baja y como enfermera no podía poner en riesgo la vida de otros… Me volví inestable, insegura, volátil.
Levantarme sin dormir, sin descansar, con más dolor que el que me acosté. Me deslizaba de la cama y tomaba medicamentos y medicamentos sin mejorar. Me quise morir. Jugué con la vida, múltiples hospitalizaciones psiquiátricas. Ya no era yo, ese no era mi cuerpo, no quería vivir así.
Mi reumatólogo me inyectó ketamina, un anestésico por venas. No podía creer que ni sueño me diera, que permaneciera hablando con él. Entonces luego de ese tratamiento experimental llamó a mi psiquiatra y dijo “su sistema neurológico no funciona, no puede seguir trabajando”.
Así comenzó mi calvario, salí de mi trabajo, me encerré en un cuarto y sin salir dejé que la depresión terminara su trabajo. Mi esposo se burlaba de mi por aumentar de peso. Se enamoró y me dejó sola, sin trabajo, sin recursos y con dos niñas pequeñas que se afectaron según sus edades.
Así me sumí en esa depresión, ausente, sin vida, un cuerpo vacío lleno de dolores y otras sintomatologías. Volví a atentar contra mi vida. Perdí mi fe en Dios y ya no era yo. Así pasaron dos años cuando un día me miré y dije no eres tu, pero que haces con tu vida. Tienes dos hijas que te necesitan.
Y comencé como la mariposa mi próxima trasformación.
Comencé a bajar de peso, dejé de sentir lástima por mi misma y comencé a aprender a vivir con dolor. Trasformé mi vida, los dolores siguen presentes, unos días mas fuertes y otros menos, pero siempre están presentes junto con todas sus complicaciones.
Recuerdo que mi reumatólogo me dijo toma estas pastillas 7 días y no mejoras inyéctate 3 días esto. Si no mejoras aguanta ya pasará. Y eso aprendí a protegerme de tantos medicamentos; mis riñones, mi hígado. Aguantar los más suaves y medicarme en los peores momentos.
Aprendí a vivir con fibromialgia.
No me he curado y sé que no podré, pero si puedo mejorar mi calidad de vida. Y la de los que amo. Luego de tres años me aprobaron el seguro social y de eso vivo. No es fácil, no cubre mi estilo de vida anterior, pero puedo tener mejor calidad de vida y seguir luchando por mis hijas y los que amo.
No es fácil vivir con dolor, hay que vivir con esto como guerreros sin sentir lástima de uno mismo.
De mi psiquiatra aprendí que le heredo a mis hijas lo que hago por lo que morir o rendirse no es una opción.
Mi consejo como paciente y enfermera es educarse, leer conocer la condición ayuda a luchar contra ella.
Volví a creer en Dios
Hola,doy gracias a cada una de las personas que tienen la valentia de contar sus vidas..Nos hace ser valientes ya que existe aun mucha ignorancia de que si es, real o no nuestro sufrimiento..vivimos el dia a dia con el dolor a cuestas..yo me decidi hace 2 años a dejar todo tipo de tratamiento a base de pastillas..no quiero seguir envenenando mi cuerpo…suficiente con lo que ya tiene..tambien me replantie mi manera de ver la vida desde mi fibromialgia.hipertención arterial incontrolable y una lista un tanto larga de otros patologias..ahora quiero vivir y buscar un poco de felicidad junto a mis 4 hombres.No es facil pero creanme …me va mejor ahora que antes..Aunque tengo muchos momentos en donde decaigo..pero me levanto una vez mas..si vivir es luchar todo los días ..estoy dispuesta a hacerlo..Cambie algunos alimentos y empeñada en bajar de peso..Si nos damos la oportunidad de querernos y querer alivianar nuestra carga de dolor y cambios de animo soy una convencida de que se puede…Asi que animo a todas (dos) los enfermos incomprendidos.Disculpen mi ortografia..Saludos cordiales desde CHile.-
Me siento reflejada en ti yo también estoy en una habitación aparte de dolores cada día tengo una cosa .tengo dos hijos uno enfermo con fibrosis quistica 14 años para diagnosticarla la enfermedad a mi me tacharon de loca pq yo decía que se moría yo siempre estaba mal .le hicieron dos trasplantes en cuatro meses me tuve que ir al otra ciudad los dos solos a esperar que llegarán unos pulmones le quedaban dos meses de vida .
Fueron tres años los dos solos luchando entre la vida y la muerte .ahora esta dentro de sus problemas viviendo
Pero yo estoy mal cada día tengo algo distinto no quiero vivir estoy diagnostica de fibromialguia pero ya no se que pensar .ahora estoy con infección de orina y he engordado 30 kg
Tengo unos padres mayores y por ellos sigo aquí …los conocidos se van amigos ya quedan menos piensa que no tengo voluta en una palabra soy una vaga
Por si alguien me lee gracias
Estoy en tratamiento spquiatrico lo digo pq si hay al quien me lo aconseja. Gracias de nuevo
Yo tambien perdi mi vida, mi marido, mi cordura, estuve ingresada en un psiquiatrico pero he podido renacer sin medicamentos que me atrofiaban y desconponian. Ahora vivo asumiendo lo que tengo y lo que soy, el que me quiere me respeta. Los demás no importan.
Paula toda la razon yo llevo toda una vida con esta enfermedad y ahora ex “jauja”antes yo era una niña enfermiza fragil y luego una adolescente “quejica” y ahora cuando la enfermedad esta diagnosticada para algunas personas una neurotica , cuando podremos tener un poco de paz.
¿tú creías en la fibromialgia antes de que te tocara a ti?
Xq yo cada vez que voy a un hospital público con un brote, las enfermeras se ríen entre ellas, y dicen que la fibromialgia no existe. Y me tratan como una mierda.
No me alegro del mal ajeno. Pero hemos tenido que esperar a que médicos y enfermeras padezcan esta enfermedad, para que empiecen a creer en ella.
Dios pone a todo el mundo en su sitio antes o después.
Las que llevamos a cuestas esta enfermedad más de media vida, hemos sufrido aun más que vosotras , ya que la incomprensión que había antes era mayor que la que hay ahora.
Médicos y enfermeras. Estudien y lean. Abandonen la ignorancia. Vuestra ignorancia es una depresión para nosotros.
Nilsa, admiro tu fuerzo y comparto tu esfuerzo de Aprender a vivir con el dolor, ser resilente, y aprovechar los buenos dias, los que el dolor nos da un descanso.